El cine en Andalucía está de moda. La película La Isla Mínima, del director de Sevilla Alberto Rodríguez (1971), fue la Mejor Película en la ceremonia de los premios Goya (los Oscar de España).
Además, otra película ambientada en Andalucía, El niño, fue su gran rival en la noche de la entrega de premios. Ambos films han sido un éxito absoluto tanto de la crítica especializada como del público. De hecho, 2014 fue el año record para el cine español, el año en que más españoles fueron al cine, especialmente para ver las dos películas mencionadas.
El film La Isla Mínima cuenta la historia de una serie de asesinatos cometidos en las orillas del Río Guadalquivir (Andalucía) en los años inmediatamente posteriores al fin de la dictadura franquista. Dos policías con muy diferente carácter intentarán resolver el misterio del asesino en un ambiente lleno de mentiras y ocultaciones.
El niño, por su parte, se centra en la problemática del contrabando de drogas en el estrecho de Gibraltar, la pequeña porción del mar Mediterráneo situada entre la costa andaluza y el norte de África, separadas por poco más de diez kilómetros. Allí, dos jóvenes españoles con un futuro incierto, intentan ganar algo de dinero con el transporte ilegal, en potentes barcas de motor, de sustancias estupefacientes entre uno y otro continente.
Las dos películas demuestran la calidad del cine español en la actualidad, con historias complejas en la que todos los elementos de la trama están cuidados al máximo detalle (fotografía, guion, vestuario, sonido, etc.). De esta forma el cine español consigue acercarse poco a poco a la espectacularidad del cine americano y a la exquisitez formal del cine francés.
